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Sal de manantial de Navarra, 100% Natural, libre de microplásticos y nitritos, sin sutancias añadidas y rica en oligoelementos.
De Navarra, de los pies de los montes de Urbasa y Andía se encuentra el nacimiento del manantial y las salinas de dónde todos los años se saca Sal Ancestral.
Su origen se remonta a hace 220 millones de años, a una altitud de 700 metros en zona pirenaica y proceso 100% artesanal.
Detrás de la sal de manantial Ancestral hay una familia de maestros salineros que lleva generaciones produciendo sal pura de manantial de manera totalmente artesanal, sin procesos químicos ni máquinas, con sus manos expertas y su buen saber hacer. Los conocimientos y saber hacer que se han ido trasmitiendo generación tras generación son los que con ayuda de la naturaleza nos permiten moldear la sal.
Por todos estos motivos, la sal de manantial Ancestral es un producto único en el mundo, un fenómeno de la naturaleza.
La tierra es donde empieza nuestra historia, quien ha conservado para nosotros este fenómeno de la naturaleza. Gracias al mar que cubrió la Península Ibérica en la época prehistórica, concretamente en el Triásico Superior, y su posterior secado, se depositaron en el subsuelo a gran profundidad sedimentos salinos que conservan la pureza y composición propias de aquella época. Por este motivo nuestra sal está libre de cualquier contaminación.
El agua es el portador de este fenómeno de la naturaleza. En su viaje por el subsuelo, el agua del manantial erosiona los depósitos salinos hasta que emerge a la superficie en forma de manantial salado. Se puede establecer que el Mar Mediterráneo contiene de 37 a 39 gramos de sal por litro de agua. Nuestro manantial nos ofrece una gran concentración salina, llegando incluso a los 280 gramos de sal por litro de agua.
El sol es nuestro principal aliado, quien pone a nuestro alcance este fenómeno natural. Gracias al sol, el agua se evapora y deja paso a la sal. Dependiendo de su intensidad, obtenemos un tipo de sal u otra ya que la temperatura marca la velocidad del proceso de secado y cristalización de la sal. El hecho de necesitar el sol y su calor hacen de nuestro producto un bien escaso y de temporada. La salina está abierta únicamente los meses de verano.
El viento es nuestro cincel. Nos ayuda a moldear los cristales de sal, dando forma a las diferentes sales de manantial Ancestral. Dependiendo de su dirección, con qué intensidad sople y cuánto duren sus rachas, obtendremos un tipo de sal u otra. El hecho de que la salina este ubicada en un pequeño valle, ayuda a canalizar el viento y poder obtener así un producto de gran calidad y tremendamente especial.
Gracias a dos factores clave, nuestra sal se encuentra completamente libre de cualquier tipo de contaminación: la ubicación estratégica de nuestro manantial (700m sobre el nivel del mar y alejado de cualquier industria o foco contaminante) y el origen de los depósitos salinos, (formados hace 220 millones de años).
Nuestro método de trabajo y extracción se remonta a la época romana. Nosotros hemos continuado su legado, conservándolo y respetándolo de generación en generación. Seguimos utilizando la misma técnica, el trabajo del hombre, y tanto los conocimientos adquiridos como la acción de la naturaleza son lo que nos permite conseguir una sal tan especial.
Con el fin de mantener la esencia y pureza de nuestra sal, no utilizamos ningún proceso o técnica añadida para mejorar el producto final. No añadimos antiapelmazantes, ni utilizamos ningún tinte o proceso de blanqueado. Tampoco necesitamos lavarla para eliminar posibles agentes contaminantes. Nuestra sal llega a manos del consumidor tal y como nos la ofrece la naturaleza.
Debido a la época en la que se formaron los depósitos que alimentan nuestro manantial (Triásico Superior) y que el producto final no ha sufrido ningún lavado ni alteración, nuestra sal es especialmente rica en más de 84 minerales. Algunos de los minerales que se pueden encontrar en mayor concentración en la sal de manantial Ancestral son potasio, magnesio, yodo, calcio o manganeso, entre otros.
Flor de Sal de Manantial – 150 gr Nuestro producto más preciado. Dentro de la caja de cartón, las escamas de flor de sal de manantial vienen envasadas en un frasco de vidrio, para que permanezcan intactas y se mantengan en estado óptimo. El envase permite añadir a los alimentos las escamas de sal directamente con los dedos. Además, evitamos el contacto...
Flor de Sal de Manantial – 1500 gr Para su envasado utilizamos una bolsa adaptada a la hostelería.
Piedras de Sal de Manantial – Molinillo 90 gr Debido a su dureza y tamaño, presentamos nuestros cristales de sal gruesa en molinillo de vidrio. Es la manera perfecta de aportar la sal justa a nuestros alimentos.
Piedras de Sal de Manantial con Pimienta – Molinillo 90 gr Se trata de la combinación de nuestros cristales de sal gruesa mezcladas con granos de pimienta multicolor de origen español que combina cuatro tipos de pimienta: negra, blanca, rosa y verde.
Sal líquida – 150 ml Presentamos nuestra sal líquida en envase de vidrio con difusor. El vidrio conserva el contenido en perfecto estado y el difusor permite una aplicación óptima del producto en los alimentos.
Sal de Manantial Tradicional – 300gr Para su envasado, además de la caja de cartón, utilizamos una bolsita transparente que protege el producto. Está compuesta de un material muy novedoso, hecho con fécula de patata, compostable y biodegradable.